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lunes, 15 de septiembre de 2008

Civismo

Saludos hijossssss de puta. Aqui Marlo al aparato. En primer lugar quiero decir que me toca los cojones que no haya recibido 200.000 visitas en mi primer post. Sé que estáis ahí, cabronazos. Hoy quiero hablaros de los distintos comportamientos que tenéis que tener en la vida para ser un dios como yo. Al lío:

  • Saludos. Si vas a saludar a una mujer, lo mejor es que le des dos besos. Pero ojo, no dos besos en los mofletes, tu se los plantas en la puta boca, y si puedes meter la lengua asquerosa esa que tienes, mejor. Si es un tio, lo mejor es darle la mano, pero te recomiendo que antes te refriegues la mano por la raja del culo, para que coja sustancia. Esto no es más que una muestra de afecto. Yo lo llevo haciendo muchísimos muchísimos años.
  • Jiñar (o cagar). Si vas a defecar en un cuarto de baño que no es el tuyo, te recomiendo que vayas "removido" de casa. Fúmate un cigarro, tómate un café que has dejado enfriar o simplemente toma un poco de laxante. La cosa es que le cagues la taza y dejes el típico refregón. La escobilla está prohibida.
  • Miccionar (o mear). Mea siempre de pie y procurando atinar con el chorro al borde de la taza. Esto bien hecho queda una composición preciosa. Si se te sale de la taza no te preocupes, mejor fuera que dentro. Si eres una mujer, méale directamente en el lavamanos o en la ducha.
  • Conversaciones. Procura echarle todas las babas que puedas mientras hablas (marca mucho la P, por ejemplo) y también le da un toque especial el dejar que se acumulen las babas alrededor de la boca, a modo de marco decorativo. Ni que decir tiene que debes utilizar todos los insultos y barrabasadas que se te ocurran. Una buena despedida es una patada en los cojones.
  • Pagar. Tú no haces eso.
  • Higiene. Como lo de pagar, nanai.
  • Comportamiento. Con los años, tienes que desarrollar la técnica de rascarte los huevos mientras andas. Tambien rascarte el culo y meterte las manos en los sobacos para olértelas luegos. Los mocos son también una parte importante. Un pedo en público siempre es agradecido por la gente de tu alrededor, y los erúctos, guárdalos para cuando estés con esa persona especial y proyéctaselo en la puta cara. Por favor, habla con el móvil a voces aunque estés en un velatorio.
Bueno, yo me voy de putas con el desgraciado de Cli Cli. Si se me olvida algo, teneis los comentarios, que no muerden.

viernes, 12 de septiembre de 2008

Hola hola hijos de puta

Bienvenidos a este mi espacio, el espacio de Marlo, donde huele a azufre y puedes chuparle la cabeza a las gambas, que aqui no te vamos a mirar. Pero si te pasas, a lo mejor te llevas una ostieja. Hoy quiero hablaros del cine español. El otro dia, mi primo Claudio, que es un invertido, me estuvo calentando la cabeza para ir al cine. Yo lo hubiera mandado a la mierda, pero estaba cansado de sacarme pelotillas de pelo del ombligo, así que decidí ir.


"Dime primo, qué basura me llevas a ver"

El muy hijo de puta decidió ir a ver "Los girasoles ciegos", porque quería contársela al abuelo Zósimo una vez se volviera para El Cañavate. Os voy a contar de qué va este montón de basura, porque a veces parezco gilipollas gastándome la pensión de invalidez en ver estas mierdas, desde luego. Voy a destripar cosas de la película, así que estás avisado, hijo de puta. Quiero decir que entré predispuesto a entrar a mearme de la risa, pero se ve que se contagió a toda la sala.

La movida esta está ambientada en época de Posguerra, y se centra en una familia, cuyo padre vive en un zulo, oculto, pues está acusado de ser un rojo. El padre es Paco... digooo, Javier Cámara. Su mujer es Maribel Verdú, que está muy buena, desde luego. Esta pareja tiene dos hijos, una hija preñada que decide irse a Lisboa con el imbécil de su novio (que es uno que sale en El Internado, y parece que tiene los dos ojos a punto de chocar, al contrario que con Uma Thurman), y el otro hijo, un zagalico pequeño que es el ser mas odioso de la película, es...

¡¡ROGER PRINCEP!! El niño de El Orfanato

El niño más soso, imbécil y pedante que me he echado a la cara, después del hijo del Indalencio, pero ese acabó follando cabras. A este niño solo le deseo el peor de los futuros como actor, por el mal rato que me hizo pasar el hijo de puta. Es que es... Es... Voy a poner una situación para que veáis como es. Ojito que esto es del final:

El padre, en un arrebato decide tirarse por la ventana, ante su mujer y el niño. La mujer (Maribel Verdú), cae de rodillas en un llanto desgarrador, con una cara que me erizó los pelos del culo, y el niño, impasible, pregunta: "¿Qué pasa mamá?"


¿Que qué pasa?¡¿Que qué pasa?! ¿¡ACASO TU PADRE SE SUELE TIRAR MUCHO POR LA VENTANA!?. Quiero decir que cuando el niño soltó esa perla, el descojone se hizo general en toda la sala, así que confirmé que estaba rodeado de cabronazos como yo.

Pero esta pareja no está sola, ahhh no. Detrás de la madre hay un cura, o un diacono o lo que mierda sea, un cura joven, vamos, que está mas salido que el pitorro de un botijo y no hace más que tener fantasías con Maribel Verdú. La desea mucho, y Jose Luis Cuerda (ainsss, con lo que has sido tu...) mostrarnos hasta qué punto llegan los calentones que se pilla con ella de una forma horrorosa. Yo creo que el director de Dunyayi Kurtaran Adam lo hubiera resuelto mucho mejor. Lo hace de la siguiente manera:

Plano 1: El cura está tumbado en la cama, desvelado, con el gesto turbado.
Plano 2: Corte y pasa directamente a una imagen del cura FOLLANDO CON UNA ALMOHADA PLEGADA, A MODO DE VAGINA, Y ENCIMA DE LA ALMOHADA UN PUÑETERO LIBRO CRISTIANO DONDE SALE UN GRABADO DE UNA MÁRTIR SIENDO ATACADA POR UN LEÓN Y A LA QUE SE LE VE UNA TETA.
Ni qué decir tiene que el partimiento de ojete volvió a hacer acto de presencia en la sala. Si este cura hubiera conocido las vaginas en lata... otro gallo cantaría. Sobra decir que con esta escena ya se ha cubierto el cupo mínimo de desnudez exigido en todas las películas españolas.

Con este personaje, queda conformado un trío importante dentro de esta película, los llamados...

¡¡¡LOS SOBREACTUADORES!!!

Y es que los tres son malos con avaricia.

Por lo general, la película no avanza y se hace cansina, siempre la misma historia de andar escondiendo al padre, el niño poniendo caras y el cura luchando contra la lascivia. La mejor escena sin duda es cuando Javier Cámara abre las ventanas de par en par, en pleno ataque de nervios y se pone a gritar: "¡¡¡MECAGOENDIOOOOS MECAGOENDIOOOOS!!!", en esto que llega Maribel Verdú, le grita que pare, lo tira al suelo, empieza a besarle para que se calme y la escena termina con ella bajando dándole besos hasta que empieza a hacerle una mamada (no se ve, gracias a dios, no por ella, sino por el xD) y el plano final es el de él poniendo cara de "... que me tenga que haber puesto a chillar blasfemias para que venga y me la chupe... tiene cojones...".

Para acabar, mamones, no vayáis a ver esta ni otras películas españolas patrocinadas por Sogecable, Telecinco, Antena 3, Canal + y con subvención del gobierno, porque vais a ver una puta basura y vais a tirar dinero por la basura, pudiendo gastarlo en algo provechoso como irte de putas. La próxima vez que mi primo Claudio me venga con una milonga de estas, le voy a llevar allí al Conejo Feliz, donde las lucecicas rosas. Ahí ya verás como se lo va a pasar el jodío.

Lo dicho, hijos de puta, hasta mañana.